Estilos de vida saludables, mejoran la calidad de vida de las personas. Se trata de comer y dormir bien, realizar actividad física a diario, evitar sustancias nocivas para el cuerpo.
Hoy 16 de octubre, se celebra el día de la Alimentación Saludable, con lo cual me parece oportuno focalizarme en el “comer bien”. Aquella antigua frase Hipocrática “Que tu alimento sea tu medicina y que tu medicina sea tu alimento", sigue aún teniendo vigencia. Enfermedades por falta algún nutriente o por exceso de éstos, están estrechamente relacionadas con el modo en el que se seleccionan los alimentos; motivo por el cual, alimentarse de una forma saludable, no solo mejora la calidad de vida, sino que además ayuda a reducir el riesgo de enfermarse.
No existen alimentos prohibidos, ni tampoco súper alimentos. Se trata de comer de todo un poco, lo más variado posible, ya que cada alimento aporta algún nutriente necesario para la vida. Por otro lado, es importante el equilibrio, es decir; no debemos abusar en las cantidades. Cada alimento debe ingerirse en su justa medida.
Las frutas y verduras son una fuente importante de vitaminas y minerales. A mayor cantidad de colores consumidos en el día, mayor variedad de nutrientes ingeridos. Se recomienda comer 5 porciones de frutas y verduras al día, pero encuestas evidencian que los argentinos consumimos solo 1.9 porciones al día. ¿Por qué no comenzar hoy a mejorar estos números? La leche, el yogurt y los quesos. Son una importante fuente de Calcio, indispensable para los huesos, y de proteínas. Se prefieren los lácteos descremados, reducidos en grasas malas para la salud cardiovascular.
En cuanto al consumo de carnes: vaca, cerdo, pollo, pescado, es importante seleccionar aquellos cortes con menor cantidad de grasas. El grupo de los cereales, conformado por las harinas, fideos, arroz, polenta, no debe ser un grupo al que debamos tenerle miedo, pero sí respeto. Estos alimentos son muy nutritivos y energéticos. Por lo cual, no debemos excluirlos, pero si evitar caer en excesos, ya que consumos desmedidos podrían repercutir negativamente sobre el peso corporal. Por otro lado, la versión integral de estos resulta más beneficiosa para la salud, ya que conservan mayor cantidad de vitaminas y minerales, ayudan a dar mayor saciedad y a mejoran el tránsito intestinal. Características similares presentan las legumbres que tiene energía y a su vez aportan proteínas, fibra y hierro y otros minerales.
En cuanto a cómo hidratarse durante el día, el agua siempre será la mejor opción. Bebidas azucaradas, como jugos y gaseosas, no tienen ningún efecto nutritivo y simplemente generan aumentos de peso. El resto de los alimentos como golosinas, productos de panadería, snacks, bebidas alcohólicas… No se trata de prohibirlos, sino de moderar su consumo y dejarlos solo para eventos especiales.
Por último, alimentarnos saludablemente, no solo implica realizar una adecuada selección de alimentos sino también de respetar los momentos. Saltear comidas nos aleja del objetivo de tener una alimentación saludable. Es importante respetar las 4 comidas principales: desayuno, almuerzo, merienda y cena, y se podría sumar alguna colación de ser necesario. Cada comida es un momento del día oportuno para nutrirnos, y no tiene el mismo efecto en nuestro cuerpo comer 4, 6 comidas al día que realizar solo 2 grandes comilonas diarias.
Licenciado en Nutrición recibido en la Universidad de Buenos Aires (UBA). Le decis que comes y te dice quien sos. #QueComoHoy #MarketingDeLaObesidad